jueves, 19 de mayo de 2011
martes, 17 de mayo de 2011
Ensayo sobre Persuasión
INTERPRETACIÓN DE LA IMAGEN VISUAL VS INTENCIONES DE DOSTOIEVSKI
Por: Santiago Alarcón Ceballos
Paola Loaiza Mejía
Natalia Vásquez Piedrahíta
Para la sociedad del siglo XIX, no era normal observar dentro de una composición literaria, una versión cruda y real de lo que pasaba entre ellos mismos. El poder persuasivo que tuvo o podía haber tenido Dostoievski y su obra era magnánimo porque incitaba al pueblo a una rebelión, porque ellos eran el público directamente afectado e identificado con los personajes principales, es por esto que se explican acciones del gobierno zarista contra los grupos revolucionarios donde se encontraba el autor, y las múltiples persecuciones por deudas alrededor de todo Europa, que paradójicamente le ayudaban a su composición, agregándose a su “bulto” de desgracias, para él casi vitales, y las cuales plasmaba en el papel. Además con las persecuciones llegaba aún mas acogimiento del público. Porque todos se hacían a la imagen de Raskolnikov, de Vania (Iván Petrovich), de Natasha y Sonia, que eran como ellos mismos, era la descripción de una fotografía del San Petersburgo de la época, pero no sólo eso, porque el arma de persuasión masiva más poderoso que tenía Dostoievski era el lenguaje escrito, la palabra, la literatura, por encima de la imagen que era prefijada en ese entonces por lo que se veía en las calles.
Y es que acá podemos hablar de poder persuasivo de la imagen como palabra, pues en sí Dostoievski no era un hombre muy mediático, y sus trabajos hablaban por sí solos, la creación de la imagen de sus obras fue y es subjetiva a cada quien que lo lea. Y justamente por eso pudo haber ejercido una atracción negativa mucho mas fuerte que el de la imagen de su época en cuanto a los detalles y particularidades, “el pensamiento, los conceptos, los juicios y las ideas son abstracciones que muchas veces no pueden ser visualizadas”[1].
Son esos sentimientos de represión humana, de cuestionamiento al sentido de la vida y la religión, los que Dostoievski logra penetrar en sus lectores, puede que de una forma no tan incisiva pero con una finalidad persuasiva hacia la reflexión y el cambio social, es por eso que los grandes editores de sus obras a través de los años han tendido a reproducir imágenes con tonos oscuros, sus personajes principales son cabizbajos y sin vitalidad en sus rostros, además, las circunstancias solo ayudan a que haya más desgracia en los acontecimientos.
En la actualidad el impacto de la televisión y posterior Internet y sus TICS, se ha conducido una vana idea de que cualquier tipo de información se puede expresar y plasmar en imágenes, pero cómo mencionaba Maria Jesús Lamarca “esto es imposible”. Es el fenómeno de la farándula y el entretenimiento actual, cada vez hay más imagen, sobreexposición de personajes públicos, y torrentes de información y chismes que corren por todos los medios en forma de imágenes, trabajo de miles de paparazzis en el mundo, y lo que menos se evidencia en sus trabajos es un confrontamiento entre elementos que haya en la imagen.
Pero a pesar de esto, se puede hablar de que la imagen atrae a gran parte de la población, a la que antes era analfabeta, y que ahora no hace falta ser de un estrato bajo para preferir la información dada por lenguaje visual, ya que es la recién llamada “cultura audiovisual” la que ha asistido la educación de las generaciones “Y” y “Z”. Pues, antes se podía educar a través del discurso, la buena comunicación, y la literatura, como era el oficio de Dostoievski.
“Nietzsche confesó en cierta ocasión que Dostoievski era la única persona que le había enseñado algo de psicología. Y es que el discurso no es siempre necesariamente la manera más completa y profunda de conocimiento. Y tampoco la manera más eficaz de influencia. En este sentido la televisión como agente socializador tiene una ventaja que no han tenido en otras épocas otras grandes instituciones vertebradoras de las conciencias, como la escuela, la Iglesia o el Estado. La Iglesia, por ejemplo, realizó durante siglos una tarea eficaz como transmisora de ideología, mediante su omnipresencia social. Pero, aunque utilizaba algunos recursos de carácter emotivo, como el arte o la liturgia, recurría básicamente al discurso, a la verbalización y a la conceptualización teológica. En cuanto tal, encontraba resistencias, generaba contestaciones y discrepancias. La televisión, qué es también una realidad omnipresente, actúa, en cambio, desde la impunidad del entretenimiento, de ser un poder fascinante, aparentemente inocuo y casi incontestado.”[2] Y es de pronto, esa incapacidad de retroalimentación o respuesta de un público la que llevo al desarrollo de las TICS, y con ellas del consumo de imágenes.
Hablando de persuasión es curioso que con Dostoievski ocurra un caso coincidente, pues en mayor parte de sus obras, la trama gira en torno a ella. Es el poder absoluto de la consciencia por encima del aristócrata quien cumple ésta función. Llevando por ejemplo a asesinatos de usureras, con el objeto de que el intelecto esté por encima de la ley, de que hay hombres extraordinarios en la historia que tienen un “permiso” implícito para cometer ciertos actos, y es que la persuasión termina siendo el problema a resolver.
Al final se debe tener en cuenta que cada medio masivo, desde la literatura, hasta las imágenes digitales posee su sentido y su espacio ya que cada uno tiene una razón para estar ahí, aunque para Maria Lamarca “ningún medio de expresión posee igual potencia que el lenguaje para el pensamiento discursivo” el debate está abierto, y es allí donde las sociedades de la información deberán actuar para que esto no sea un problema de orden público o educacional, sino por el contrario encontrar el sentido positivo de la persuasión por medio de la imagen.
El objetivo de la Publicidad como tal y el de Dostoievski, van completamente separados, aunque se podría hacer una similitud entre ambos en cuanto nuestro personaje utiliza hábitos y estilos de vida con los cuales los lectores se pueden sentir identificados, y esto puede causar ese halo seductor en la parte negativa de la vida cotidiana de muchas personas. Simplemente son formas de contar y de escribir lo que causa esa invasión y así lograr su fin, mostrar lo maléfico de la humanidad, contrario a la publicidad que trata de exhibir la perfección que el hombre no tiene.
Uno de los fines de Fiodor para ser escritor, hace referencia a una dimensión radicalmente persuasiva, es decir, no sólo quiere convencer a los lectores sino hacerles creer o darles a conocer que todas las situaciones que el enfatiza en sus libros, son posibles, y que nadie esta absento a que le ocurra algo similar. La publicidad es lo más apreciado de los bienes de consumo y a esto se le suma, que, sólo les importa no solo el consumo de objetos sino imágenes, creando así estereotipos que la gente sigue y desea tener u observar; por lo que a Dostoievski no le causa tanta importancia esto, es más importante lo interior, causar impacto en los sentimientos de las personas y bajarlos al mundo cotidiano, al mundo donde todos tenemos problemas por más pequeños que sean y no un mundo de fantasía, de comercio, de seguir una moda. También hace referencia a un discurso, un funcionamiento discursivo, en el cual muestra coherencia, adecuación, intencionalidad en su papel de escritor. Todo tipo de discurso posee un corpus de recursos formales, que le es propio y eso mismo lo logra distinguir de los demás, más un por salirse de los temas normales que otros autores plantean, aludiendo a una publicidad marcada.
Hoy en día, el uso y las formas de la comunicación publicitaria han llegado a tal punto de que ésta se interese más en comprar clientes que vender objetos. Los mensajes publicitarios no sólo dicen sino que predican otras cosas, como estilos de vida, se fomentan ideologías, se convence a las personas de utilizar ciertos hábitos y conductas, todo esto con la intención de borrar lo “aburrido” de lo cotidiano y hacer conseguir ese placer que hacen los objetos frente a la sociedad. Inverso a esto, a nuestro personaje Fiodor Dostoievski no le interesaba mostrar lo bueno o lo hermoso de las cosas ni creas ese estereotipo de lo que se habla. El interés de él era, atrapar esas miradas y ese deseo de los espectadores pero no con esa realidad amable y placentera sino con diversos temas caóticos de la vida humana como lo pueden ser: el hambre, el desempleo, la injusticia, la desigualdad, la muerte; Dostoievski no quiere dejar morir estos sentimientos ni arrojarlos al olvido.
Todo lo anterior (por parte de la publicidad) enfatiza ese medio que se emplea con habilidad y astucia para conseguirlo todo, especialmente para engañar o evitar una artimaña llamada estratagema de seducción, dirigida a atrapar miradas y el deseo de los espectadores. A Dostoievski no le interesa las críticas de sus lectores, para él la única realidad placentera para escribir era esa, lo moralmente más bajo de la sociedad, se centraba en mostrar exactamente lo que la humanidad no quería ver de sí misma, lo más degradante de las acciones del hombre, por este motivo era rechazado; pero el verdadero fin de Dostoievski era mostrar un camino para la sociedad, reflejar una salida de la manera más sutil en sus obras, de un modo totalmente implícito, empleaba en sus escritos una especie de psicología inversa para generar una mejoría en la mentalidad humana.
Pueden existir esos anuncios publicitarios algo “subliminales” en nuestro autor, ya que se puede apreciar que cuando se quiere compra un libro, se lee primero el título y adjunto a este, ese pequeño resumen que nos ubica en el tema; esto es lo que llama completamente la atención, de gusto o no en las personas, pero que hay un afán escondido de saber que más hay en el texto, que más problemáticas toca en el transcurso de este, en que va a parar la suerte de los protagonistas mencionados; y aunque las personas sientan ese rechazo a los libros y textos de Dostoievski por no ser temas que ellos esperaban, cabe recalcar que de igual manera se presenta una seducción de lo efímero, y esta satisfacción nunca será colmada
Por otra parte, podemos ver que en la actualidad Dostoievski es más aplaudido que repudiado y es por ese mismo manejo de la publicidad del que tanto se ha tratado en este escrito. En el siglo XIX (siglo vivido por Dostoievski) la publicidad logró hacer que la sociedad de ese entonces repudiara la obra de Fiodor y todas aquellas que mostraran la desgracia humana y las actitudes nefastas de la naturaleza del hombre; actualmente, contrario a lo que pudo lograr en el siglo XIX, la publicidad volvió a la humanidad “moderna” una máquina extremista que desea ver de sí misma lo más perfecto o más nefasto, que es lo que encuentran en la obra de Dostoievski.
Podemos considerar los temas tratados por Fiodor desde otro punto, el simple echo de capturar al lector con tramas que causan controversia por su difamación publicitaria, pero que con su buena elaboración generan en los espectadores ansias de continuar sumergidos en sus historias. Para Dostoievski es fundamental que el mensaje emitido por el sea comprendido fácilmente por el lector, de este modo da la oportunidad de que este no solo estudie las formas mediantes las cuales se produce una obra sino también el modo en que se construye su valor de uso. Así, el autor no solo crea un texto sino que es capaz de ayudar al destinatario a identificar el texto como tal.
A diferencia de la publicidad, la cual debe tener un contexto sociocultural para tener en cuenta la conveniencia de respetar los códigos establecidos del gusto y eviten transgredir de alguna forma con innovaciones formales o semánticas que pongan en riesgo su comunicación de persuasión y convicción, Dostoievski no tiene esas inconveniencias puesto que los textos literarios están a su favor, en el lenguaje literal se puede manipular los mensajes emitidos como se quiera, pero si tiene que tener cierto realismo dentro del contexto que se maneja en la historia desarrollada.
Debemos, por otro lado, mostrar partes positivas de la publicidad, es una ventaja para conocer todo tipo de producto, incluso los escritos de Dostoievski; la publicidad bien empleada puede traer grandes beneficios tanto para emisor como para receptor.
En última instancia, el paralelo entre fines publicitario y fines de Dostoievski por medio de sus textos abarca muchos puntos de diferenciación, uno de estos nos llevo a demostrar la diferencia que hay entre el objetivo que desarrolla la publicidad por medio de imágenes que se dirige a una sociedad hedonista para convertirla en una sociedad más y completamente concupiscente y mecanizada, y un escritor admirable, con un gran lenguaje estético y literario, que aunque fue criticado por tratar temas tan escandalosos, lleva mensajes profundos para mover un poco la mentalidad de una sociedad superficial y cegada por lo material.
Pero lo que radicalmente las diferencia, es que la publicidad trata de temas muy maquillados, muy estéticos, muy adornados, algo fuera de la realidad; cosa que nunca quiso hacer Dostoievski, su esencia era dar a conocer el mundo como él lo veía, vago, frio, pobre, en cuanto a sus experiencias y todo eso lo plasmaba en sus textos.
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